4 Días Ruta desde Marrakech por el Desierto de Marruecos

Descubrir Marruecos es sumergirse en un mundo de colores vibrantes, aromas especiados y paisajes impresionantes. Una de las mejores maneras de experimentar la magia del país es a través de una ruta de 4 días desde Marrakech por el Desierto de Marruecos, un recorrido que nos llevará por montañas, kasbahs, oasis y las dunas doradas del Sáhara.

Día 1: Marrakech – Ait Ben Haddou – Valle del Dades

Nuestro viaje comienza en Marrakech, la ciudad roja, donde temprano por la mañana partimos hacia las montañas del Atlas. Atravesaremos el famoso puerto de Tizi N’Tichka, a 2,260 metros sobre el nivel del mar, disfrutando de unas vistas panorámicas impresionantes.

Ait Ben Haddou: La joya bereber

Nuestra primera parada es la Kasbah de Ait Ben Haddou, un antiguo ksar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sus calles de adobe nos transportan a otra época y han servido de escenario para famosas películas como Gladiador y Juego de Tronos.

Ouarzazate y el Valle del Dades

Continuamos hacia Ouarzazate, conocida como la «Puerta del Desierto», donde visitamos la imponente Kasbah de Taourirt. Luego seguimos nuestro camino hacia el Valle del Dades, un paraje espectacular de formaciones rocosas y gargantas esculpidas por el río. Pasamos la noche en un riad típico con vistas inolvidables.

Día 2: Valle del Dades – Gargantas del Todra – Merzouga

Tras un desayuno tradicional, nos dirigimos a las famosas Gargantas del Todra, un impresionante cañón de paredes verticales que alcanzan hasta 300 metros de altura. Este es un lugar perfecto para los amantes del senderismo y la fotografía.

El desierto de Merzouga: la puerta al Sáhara

Continuamos nuestro camino hacia Merzouga, en la frontera con el desierto del Sáhara. A nuestra llegada, cambiamos el coche por dromedarios y emprendemos una travesía por las doradas dunas de Erg Chebbi, donde contemplamos una de las puestas de sol más espectaculares del mundo. Pasamos la noche en un campamento bereber bajo un cielo estrellado, disfrutando de una cena típica con música tradicional.

Día 3: Merzouga – Rissani – Valle del Draa – Ouarzazate

Nos despertamos temprano para disfrutar del amanecer sobre las dunas, un momento místico que quedará grabado en nuestra memoria. Tras desayunar en el campamento, regresamos en dromedarios a Merzouga para continuar nuestro viaje.

Rissani: La cuna de la dinastía alauita

Visitamos Rissani, una ciudad histórica conocida por su mercado tradicional, donde aún se pueden ver burros como medio de transporte. Es un lugar perfecto para conocer la cultura y gastronomía local, como la famosa pizza bereber.

El Valle del Draa y sus palmerales

Atravesamos el extenso Valle del Draa, una región de paisajes exuberantes con miles de palmeras datileras. En el camino, descubrimos antiguas kasbahs y aldeas berberes que nos muestran la esencia auténtica de Marruecos.

Por la tarde, llegamos a Ouarzazate, donde pasamos la noche en un encantador riad.

Día 4: Ouarzazate – Alto Atlas – Marrakech

El último día de nuestra ruta lo dedicamos a regresar a Marrakech, cruzando nuevamente el Alto Atlas. En el camino, visitamos pueblos bereberes tradicionales y disfrutamos de las últimas vistas panorámicas del viaje.

Llegada a Marrakech

Llegamos a Marrakech por la tarde, donde tenemos la oportunidad de explorar la mítica Plaza Jemaa el-Fna, llena de encantadores de serpientes, puestos de comida y espectáculos callejeros. Así concluimos esta inolvidable ruta de 4 días por el desierto de Marruecos.